Pese a seguir una dieta adecuada y rica en fibra, hay algunas personas que todavía tienen problemas con el tránsito intestinal. ¿Qué podemos hacer en estos casos para evitar el estreñimiento? Por supuesto, la respuesta es deporte.
Que el deporte es importante y muy beneficioso para nuestra salud es algo que todos ya tenemos más que aprendido. Numerosos estudios científicos han demostrado una relación positiva entre la práctica deportiva y los beneficios de la salud no sólo física sino también mental, entre los que se encuentran la prevención de enfermedades como la obesidad, la hipertensión o la diabetes, la mejora del estado de ánimo y de la autoestima, o la reducción de la depresión, la ansiedad o el estrés. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la actividad física para prevenir alguna de estas enfermedades.
Lo que muchos no saben es que también nos ayuda a digerir los alimentos con mayor facilidad ya que acelera la actividad intestinal. Movernos hace circular los alimentos a través de nuestro sistema digestivo de forma más ligera, y aumenta el mejor uso y asimilación de los nutrientes y eliminación de las toxinas que acumulamos.
Cualquier actividad física repercutirá positivamente en nuestro organismo, pero hay algunos deportes que están especialmente recomendados para aliviar el estreñimiento ya que logran trabajar la musculatura abdominal interna:
ANDAR/TROTAR
Después de una comida copiosa, la misma naturaleza nos pide que nos movamos para “bajar la comida”. Efectivamente, andar, desde un paseo tranquilo hasta una caminata más intensa, activará todo el sistema digestivo y hará que asimiles mejor los nutrientes. Correr, por su parte, libera adrenalina, que permite que la mucosa intestinal acelere su proceso digestivo y a la vez ablande las heces favoreciendo su rápida eliminación.
BICICLETA
Ya sea de ciudad, montaña, estática o elíptica, así como salir a correr, el trote y la gravedad mueven los intestinos y su contenido, además de estimular y fortalecer los músculos abdominales. Así que ya sabes, ¡menos coche y más piernas!
NADAR
Tanto si decides que la natación es tu deporte como si la prefieres por problemas en las articulaciones, nadar facilita la circulación sanguínea y el retorno venoso de las extremidades al corazón y por lo tanto la actividad intestinal. También fortalece los músculos del abdomen, y suele dejar esa sensación de relajación que a muchas personas también les facilita ir al baño, que nunca está de más.
YOGA/GIMNASIA HIPOPRESIVA
No todos los expertos coinciden en cuanto al yoga y a las actividades de técnica hipopresiva (gimnasia abdominal como “abdominales” o crunches, sentadillas, etc). No obstante, son muchos los que aseguran que ciertas posiciones de yoga aumentan el flujo de sangre del tracto digestivo estimulando así el intestino.
No hace falta más de media hora al día para mantenernos en forma y evitar el estreñimiento. Y aunque la tecnología nos lo ponga fácil, a veces nos lo pone difícil para movernos, así que más subir escaleras a pie y menos escaleras mecánicas, más barrer y menos Roomba, más pasar a ver a una amiga y menos Whatsapp… Aunque sólo sea un rato al día, mantente en movimiento y todo tu cuerpo lo agradecerá.
